¿Quién no ha tenido nunca un botijo en casa?. O al menos en casa de los abuelos. Es un elemento muy popular, y aunque no hubiesen botijos en la Palestina de hace dos mil años, queda de lo más gracioso en el belén, siempre que lo coloques en un lugar acertado, como cerca de fuentes y pozos, en la entrada de una casa colgado de un cordel, encima de una mesa, colgado de una viga en el techo de un taller, de una rama de árbol cerca de los segadores, y donde tu imaginación de diga.
Botijo arcilla blanca
2,00€
Colócalo sobre una mesa, sobre un tronco o una piedra en el campo, cerca de los agricultores, al lado de una fuente o un pozo, colgado de una cuerda en la pared del mismo pesebre, etc. Donde lo pongas, si es en un lugar acertado, te dará buen resultado como adorno y complemento.
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